Maravilloso
equipo de Primera Nacional femenino de tenis de mesa que, tras una larga
temporada de duros entrenamientos, partidos, viajes, etc..., logra clasificarse
primeras de grupo para la fase de ascenso en Irún.
Un equipo parido gracias a una persona que prometió hacerse cargo de ellas, sacrificando hasta sus vacaciones para poder hacer una pretemporada a la altura de lo que las chicas podían dar. Su Club no apostó nunca por un equipo femenino en Primera Nacional, y éste ha demostrado ser un EQUIPO con mayúsculas, unido y compenetrado. Este entrenador las llevó a lo más alto y las hizo crecer como equipo y como jugadoras, (solo perdieron un partido en toda la temporada).
Este fin de
semana se jugaban la fase de ascenso en Irún. Como primeras de grupo, a las
siete habrían tenido la oportunidad de jugar un partido, en el que, si lograban
la victoria, obtendrían la plaza en División de Honor de manera automática.
Pero no han ido a Irún, a pesar de lo motivadas e ilusionadas que estaban, pues
ganar sería el final perfecto para una estupenda temporada. Y estaban
mentalizadas para darlo todo.